02/10/2025
Esta medida fomenta la producción y distribución de tabaco ilegal, con un impacto que va mucho más allá de la industria: pérdidas económicas para el Estado, riesgos para la salud de los consumidores y financiación de redes criminales.
Según la OMS, el empaquetado genérico implica la prohibición de “logotipos, colores, imágenes de marca o información promocional en embalajes de productos de tabaco, con excepción de nombres de marcas y productos que se muestran en un color y estilo de fuente estándar".
Australia fue el primer país en adoptarlo en el 2012 y, desde entonces, otros países europeos como Reino Unido, Francia, Bélgica, Países Bajos, Dinamarca o Irlanda han seguido el mismo camino.
Falsificaciones: qué son y por qué son un problema
Las falsificaciones de tabaco son copias ilegales de marcas registradas que intentan imitar el aspecto del producto original.
El empaquetado genérico facilita aún más este fenómeno, ya que al eliminar los elementos distintivos de cada marca, resulta mucho más sencillo para los falsificadores replicar los envases y ponerlos en circulación en el mercado negro. Como señala la Asociación para la Defensa de la Marca (ANDEMA), los envases originales cuentan con sistemas complejos de tintas y elementos de seguridad difíciles de replicar. Sin ellos, las imitaciones resultan difíciles de identificar, favoreciendo la circulación de productos ilegales.
Un ejemplo claro es Francia, donde el empaquetado genérico existe desde 2017. Desde su implantación, el consumo de tabaco ilícito ha crecido de manera significativa, hasta el punto de que es el país europeo con mayor porcentaje de comercio ilícito. Francia concentra el 38% de todo el contrabando de tabaco en la Unión Europea.
Si bien esta medida aún no ha llegado a implantarse en España, las falsificaciones han crecido en los últimos años. En 2024, alcanzaron un 1,8% del total de consumo, lo que supone un incremento de 0,4 respecto al año anterior. Este volumen es el más alto registrado hasta la fecha, teniendo en cuenta que en el mismo periodo de 2023 se encontraba en 1,4% y en el de 2022 en un 0.9%.
Además, el peso de las falsificaciones dentro del comercio ilícito en general también ha aumentado: del 25% en 2023 al 26% en 2024. Una tendencia que alerta sobre el riesgo de que el empaquetado genérico, lejos de reducir el consumo, pueda agravar el problema del contrabando.
Denunciar es clave para frenar la venta ilegal de tabaco
La colaboración ciudadana sigue siendo clave en esta lucha. Si conoces un punto de venta ilegal, ¡denúncialo! Puedes hacerlo a través de nuestro buzón o la app #NoContrabando. No lo dudes, actúa.