27/11/2017
Tras la implantación en UK, desde enero de este año, del envasado genérico en las cajetillas de cigarrillos, las formas de comercializar cajetillas de tabaco ilícitas está sufriendo una reciente transformación. Según publica la revista británica Retail Express, especializada en información del sector retail para minoristas, ha aparecido una nueva generación de cajetillas falsificadas de una calidad tan buena que es difícil identificar su falta de originalidad. “La calidad de las falsificaciones es tan buena, que son increíblemente difíciles de detectar", asegura una de las fuentes.
En este contexto, la normativa de empaquetado genérico de las cajetillas, que hace que la marca sea prácticamente imperceptible, unificando colores y aumentando la superficie de los paquetes destinada a advertencias sanitarias, podría estar facilitando esas labores de falsificación.
Esta práctica, explica la revista, está dividiendo el comercio ilícito en dos niveles: por un lado, la venta de paquetes de contrabando y falsificaciones de bajo coste; y por otro, la comercialización de un nuevo formato ilícito de calidad, que compite con los precios de venta al público. De este modo, señala la publicación, los minoristas pueden llegar a ganar grandes sumas de dinero, pero pueden verse, del mismo modo, involucrados en la venta de tabaco falsificado de manera inconsciente.
